Debido a la labor de los soldados del Gaula Militar, las capturas se llevaron a cabo en el municipio de Curumaní, Cesar. Los detenidos serían miembros de una red delictiva especializada en el hurto de datos personales para suplantar identidades ante entidades financieras, solicitando productos como créditos. Además, extorsionaban a las víctimas exigiendo dinero a cambio de no utilizar sus datos con fines ilícitos.
Durante el operativo se incautaron más de 1360 cédulas de ciudadanía de diferentes personas, cerca de 180 tarjetas SIM de distintos operadores de telefonía móvil, 12 teléfonos celulares, una tablet, 13 tarjetas de crédito de diferentes entidades bancarias, una laminadora, dos puertos de señal, una máquina de grabado láser, una planilla metálica con impresiones dactilares, tres computadores y documentación variada, incluyendo impresiones de huellas digitales y documentos oficiales de entidades como CREMIL.
El material incautado y los capturados fueron puestos a disposición de las autoridades competentes para su judicialización.
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