La Alcaldía de Bogotá, liderada por Carlos Fernando Galán, emitió un fuerte pronunciamiento en respuesta al polémico comportamiento del congresista Miguel Polo Polo tras el homenaje realizado por las madres de Soacha en el Congreso de la República.
El acto, que buscaba honrar a las víctimas de falsos positivos, fue interrumpido cuando Polo Polo recogió las botas conmemorativas colocadas en la Plaza Núñez y las arrojó a la basura, un gesto que generó indignación tanto entre los asistentes como en el país.
Respuesta de la Consejería de Paz y Memoria Histórica
Isabelita Mercado, Consejera de Paz, Víctimas y Reconciliación de la Alcaldía de Bogotá, condenó lo sucedido, expresando que el acto fue una falta de respeto hacia las víctimas y hacia la construcción de memoria histórica en Colombia. Mercado manifestó:
“Desde la Consejería de Paz y el Centro de Memoria Histórica hemos trabajado durante años con este colectivo de madres. Nos solidarizamos profundamente con ellas y pedimos respeto para todas las víctimas que vivieron la violencia del conflicto armado y ahora se esfuerzan en construir paz y dignificar la memoria de quienes ya no están”.
La consejera destacó que la memoria de las víctimas es fundamental para la reconciliación y construcción de paz en el país, y consideró que el gesto de Polo Polo vulnera los esfuerzos de quienes buscan reconocimiento y justicia por los crímenes cometidos en el pasado.
Respuesta y controversia en el Congreso
El acto de Polo Polo generó además una fuerte reacción en el Congreso. David Racero, representante del Pacto Histórico, confrontó directamente a Polo Polo en plena sesión de la Cámara de Representantes, visiblemente molesto y reprochando su comportamiento.
La intensidad de la discusión entre ambos representantes causó alarma en los presentes, quienes intentaron calmar la situación. “Así no, Racero”, le decían algunos congresistas, preocupados por la posible escalada del enfrentamiento.
A pesar de las críticas, Polo Polo defendió sus acciones en redes sociales y frente a sus colegas, afirmando que su intención era “limpiar” la Plaza Núñez.
“Si limpiar la Plaza Núñez es un delito, entonces que me metan preso”, declaró Polo Polo.
Desestimando el homenaje como un acto de manipulación política y afirmando que su gesto fue una acción en defensa de la dignidad del Congreso.
Impacto y opiniones divididas
El incidente ha polarizado opiniones en redes sociales y en el ámbito político. Mientras que varios sectores consideran la acción de Polo Polo como una falta de respeto hacia las víctimas y un obstáculo en el proceso de reconciliación, otros argumentan que el congresista tiene el derecho de expresar su desacuerdo con el acto en el contexto del Congreso.
No obstante, líderes sociales y organizaciones de derechos humanos han reiterado que la paz y la reconciliación solo serán posibles si se respetan y dignifican las experiencias de las víctimas del conflicto.
La administración distrital, a través de Mercado y otros representantes de derechos humanos, reiteró su compromiso de apoyar a las madres de Soacha y otras organizaciones que buscan la paz y la memoria en el país, enfatizando la importancia de que el Congreso sea un espacio donde se honren las experiencias de quienes han sufrido el conflicto armado.