Estos nuevos espacios no solo mejoran las condiciones de trabajo de los vendedores, sino que también impulsan sus negocios y calidad de vida
La Dirección de Espacio Público y Control Urbano del Distrito avanza en la consolidación de un entorno más organizado y equitativo, mediante el proceso de reubicación y entrega de módulos a comerciantes informales que por años han ejercido su actividad económica en el espacio público. La entrega más reciente se hizo en el parque principal del barrio Santa Ana, en donde dos vendedores informales que llevaban más de 10 años ejerciendo su actividad en condiciones precarias, hoy cuentan con un espacio digno, al tiempo que permiten la recuperación de zonas comunes para el disfrute de toda la ciudadanía.
La Administración ha desarrollado esta misma iniciativa en la calle 49 y en los parques de los barrios Primero de Mayo, Caminos de San Silvestre y El Castillo. En esta ocasión, los beneficiados son Lucila Suárez, vendedora de frutas en la jornada diurna, y Jair Andrés Poveda, quien vende alimentos preparados en horas de la noche. Con estos espacios, los beneficiarios podrán adecuar de manera más segura y ordenada sus negocios de venta de frutas y comidas, sin afectar la movilidad ni el uso público del entorno.
“Luego de varios meses con las comunidades, y luego de revisar la situación jurídica y administrativa de esta intervención, la Dirección de Espacio Público tomó la iniciativa de ya tomar posesión de estos dos módulos para hacer la entrega formal a los dos vendedores informales, al señor Jair y a la señora Lucila, que ya llevan más de 15 años trabajando en este espacio público”, indicó Héctor León, director de esta sectorial.
Este proceso forma parte de una política integral de transformación social que impulsa el Gobierno Distrital, orientada a generar oportunidades para los trabajadores informales, mejorar su calidad de vida y fomentar el respeto por el espacio público. La entrega de módulos es el resultado de un trabajo conjunto entre las autoridades, los comerciantes y la comunidad.
“Esta estrategia nos mejora muchas cosas, si llueve está uno en la caseta y no se moja. Ya puede uno manejar un estándar de higiene y de calidad”, comentó Lucila Suárez, vendedora informal beneficiada.
Desde la Administración Distrital reiteramos el compromiso con el desarrollo urbano inclusivo, y hacemos un llamado a todos los actores a sumarse a estas acciones que promueven la legalidad, el orden y la convivencia en la ciudad. Cada módulo entregado representa un paso hacia un Distrito más organizado para todos.