Metrolínea, el Gobierno Nacional y las alcaldías del área metropolitana de Bucaramanga se reunieron para analizar el nuevo plan de acción que tendría el sistema de transporte masivo
A partir del próximo lunes, 28 de abril, Metrocinco Plus, operador de los últimos cinco buses padrones que le quedan al sistema de transporte masivo, no seguirá prestando sus servicios.
Eso significa que, por ahora, el fin de semana será la última vez que los habitantes del área metropolitana verán a los grandes buses verdes que hasta ahora han hecho parte de Metrolínea.
Precisamente, ayer las autoridades se reunieron para conocer el plan de acción del SITM ante la salida de Metrocinco Plus.
De acuerdo con el gerente de Metrolínea, Emiro Castro, nuevamente se presentó el plan de rescate, que se ejecutaría por fases, para el transporte masivo.
El mencionado plan busca tener 32 buses padrones: 12 de ellos para la primera fase, 10 para la segunda y 10 para la tercera. La circulación permanente de estos buses busca garantizar que la frecuencia de espera se reduzca y pase de intervalos de cerca de 45 minutos a periodos de cinco a ocho minutos.
La primera fase contempla la prestación del servicio entre la Estación UIS y la Estación de Transferencia de Provenza. La segunda etapa extiende la operación desde la Estación Quebradaseca hasta el portal de Piedecuesta. Y la tercera llegaría hasta el Portal de Girón.
Este panorama implica dos situaciones: primera, que las alcaldías de Bucaramanga, Floridablanca, Piedecuesta y Girón aporten recursos para garantizar la operación del sistema, y dos, que se deban rentar buses de otras ciudades para que el modelo funcione.