Barrancabermeja dejó una huella imborrable en la edición 58 del Festival de la Leyenda Vallenata al obtener dos reconocimientos de alto nivel que reafirman el talento musical que florece en el Magdalena Medio.
Jairo Andrés de la Ossa logró el segundo lugar en la categoría Profesional de Acordeón, mientras que Julio Andrés Gil Barros se alzó con el título de Rey de la Piqueria Mayor.
La premiación se llevó a cabo hoy en Valledupar, en una ceremonia solemne y festiva celebrada en la emblemática Plaza Alfonso López. Allí, Jairo Andrés de la Ossa demostró una ejecución impecable del acordeón que lo posicionó como uno de los mejores del certamen. Su estilo sobrio, técnico y cargado de sentimiento fue ampliamente aplaudido por el público y valorado por el jurado, consolidando así su nombre entre la élite del vallenato contemporáneo.
Por su parte, Julio Andrés Gil Barros se consagró como el nuevo Rey de la Piqueria Mayor, imponiéndose con versos ingeniosos, mordaces y llenos de picardía tradicional. Su desempeño fue contundente desde las rondas eliminatorias hasta la gran final, conquistando al jurado con su dominio escénico, agilidad mental y elocuencia poética.
Estos logros no solo representan un triunfo personal para los artistas, sino también un motivo de orgullo colectivo para una ciudad que ha venido apostando de manera decidida por el fortalecimiento de sus procesos culturales y musicales. Tanto De la Ossa como Gil Barros han sido formados en escenarios locales y cuentan con un reconocimiento creciente en el circuito vallenato nacional.
La Fundación del Festival de la Leyenda Vallenata destacó el nivel sobresaliente de los participantes de Barrancabermeja, especialmente en una edición donde la competencia fue más reñida que nunca. El segundo lugar de Jairo Andrés de la Ossa es visto como un paso firme hacia un futuro reinado, mientras que la corona obtenida por Julio Andrés Gil Barros lo consagra como uno de los grandes verseadores de su generación.
Con una bolsa de premios que superó los 550 millones de pesos, la ceremonia de clausura también rindió homenaje a figuras emblemáticas del folclor vallenato y ratificó la vigencia del festival como el máximo escenario de promoción y preservación de esta tradición musical. La destacada participación de Barrancabermeja confirma que el vallenato tiene raíces profundas a orillas del Río Magdalena.