La comunidad está sorprendida. Hasta ahora, esto es lo que se conoce de esta historia.
Alrededor de las 10:51 de la noche, una llamada al 123 alertó a las autoridades acerca de un vehículo en llamas en el aparcamiento de Cotrasur, en la estación de servicio Terpel. Inmediatamente, la patrulla del cuadrante llegó al lugar y se informó al equipo de bomberos. Lo que inicialmente parecía ser un incendio vehicular habitual pronto se transformó en la denuncia de un individuo incinerado. Al apagar las llamas, un bombero halló en el interior del vehículo un cuerpo totalmente exterminado.
Se determinó que la víctima es Pablo Antonio Rincón Barrios, un chofer de 70 años que vive en Bucaramanga. De acuerdo con los datos recogidos en el lugar de los sucesos, su vehículo, un camión, había estado aparcado allí desde diciembre, posiblemente por motivos de trabajo.
Una de las cifras fundamentales en este estudio fue proporcionada por una trabajadora de la estación de servicio Terpel. La mujer informó que cerca de las 9:20 de la noche, le vendió a Rincón Barrios un galón de gasolina. Aproximadamente una hora más tarde, a las 10:40 p. m., lo volvió a ver en las proximidades de la estación.
Los testigos narraron el suceso en el que falleció el individuo incinerado.
Pese a los intentos de clarificar el caso, hasta ahora los responsables del suceso son desconocidos. Las autoridades examinan si fue un accidente, una acción deliberada o si existen terceros implicados en la trágica muerte del conductor.
En la revisión técnica del cuerpo, se concluyó que estaba totalmente incinerado, sin la posibilidad de detectar heridas adicionales. Por la naturaleza del incidente, se ha necesitado tanto al equipo de bomberos como a un técnico en incendios para llevar a cabo un análisis más exhaustivo que contribuya a clarificar las circunstancias del suceso.
Los científicos también examinan posibles cámaras de vigilancia en el área y recolectan declaraciones de testigos que puedan proporcionar datos significativos acerca de las últimas horas de Rincón Barrios. Asimismo, se ha requerido una autopsia para establecer si el conductor murió a causa del fuego o si existió algún otro elemento relacionado.
En la revisión técnica del cuerpo, se concluyó que estaba totalmente incinerado, sin la posibilidad de detectar heridas adicionales. Por la naturaleza del incidente, se ha necesitado tanto al equipo de bomberos como a un técnico en incendios para llevar a cabo un análisis más exhaustivo que contribuya a clarificar las circunstancias del suceso.
Los ininvestigadores también examinan posibles cámaras de vigilancia en el área y recolectan declaraciones de testigos que puedan proporcionar datos significativos acerca de las últimas horas de Rincón Barrios. Asimismo, se ha requerido una autopsia para establecer si el conductor murió a causa del fuego o si existió algún otro elemento relacionado.