Fenalcarbón alerta que los nuevos tributos podrían afectar severamente la competitividad y las exportaciones del sector minero.
La Federación Nacional de Productores de Carbón, Fenalcarbón, alertó que los tributos aplicados al sector en el contexto de la crisis interna perjudicarán la competitividad del mineral colombiano en los mercados internacionales y una eventual imposición en cascada haría inviable el funcionamiento de pequeñas mineras. Carlos Cante, líder de la agremiación, subrayó que “esto forma parte de la misma táctica para eliminar la competitividad internacional de los carbones colombianos y respaldar un modelo de transición”.
Según el Decreto 0175, que establece la base imponible del producto, se presentan dos situaciones para establecer la base imponible de este impuesto, para la primera venta en el territorio nacional o para la venta a nivel internacional.
En la primera transacción dentro del país: la base imponible será el valor de la transacción. Para la exportación, el valor FOB de los productos obtenidos será la base imponible. En las situaciones en las que el exportador directo es el que extrae el producto gravado, el impuesto solo se aplicará una vez.
En 2024, Colombia generó cerca de 65 millones de toneladas de carbón, lo que equivale al 1,1% del Producto Interno Bruto del país, concentrándose la mayoría de la producción en La Guajira, Cesar y Norte de Santander.
De acuerdo con Cante, “no solo los grandes productores se verán impactados, sino también los pequeños mineros, lo que repercutirá en la estructura económica del país”.
Las sugerencias gubernamentales
El Gobierno ya expresó que, mediante una nueva reforma fiscal, aspirará a que este impuesto sea permanente, dado que, en el contexto de la crisis interna, se extenderá hasta el 31 de diciembre de 2025.
Esta acción ha provocado un fuerte debate en la industria del carbón y ha ocasionado inquietudes acerca del porvenir de la industria en Colombia.