En la actualidad, Luis Carlos Jaimes Fula está recluido mientras sigue el juicio por el delito de homicidio agravado.
Por varios días, el pensamiento de perpetrar un homicidio estuvo golpeando el espíritu de Luis Carlos Jaimes Fula, de 26 años.
Observó las actividades de su víctima durante las madrugadas previas. Recordó sus acciones y, al sentirse preparado para ataques, lo encerró en la madrugada del 4 de enero de 2025.
Jaimes Fula tenía la certeza absoluta de que Neyder Andrey Gualdrón Ayala transitaría por la calle 24 y la carrera 7 del barrio Girardot a las 3:00 de la mañana de ese día. Era su costumbre. Lo realizaba cada madrugada. Después de avanzar un par de cuadras, llegaba a la olla de bazuco, donde adquiría su ‘cigarrillo improvisado’.
Él lo aguardó, con paciencia, detrás de un vehículo. Una vez que vio la silueta de dos hombres desgarrados.
Dejó que avanzara unos 20 pasos más, antes de sorprenderlo con el cuchillo que había seleccionado con precaución. Observó a ambos costados y se levantó. Después, amenazó a Neyder, de apenas 24 años, golpeándolo con el arma blanca. El joven intentó escapar agobiado, pero sus pies no le funcionaron y perdió rapidez. Luis Carlos lo pudo lograr. Lo arrojó y lo abandonó a su destino. A pesar de que el instinto de supervivencia forzó a Neyder a levantar los pies y eludir las cuchilladas, no logró mantenerse seguro. Su antagonista le infringió el puñal en el pecho.
Sin compasión, se vanaglorió de su delito ante el acompañante de Neyder y posteriormente se evadió.
El joven, malherido, se puso en pie, con el espejismo de que podría sobrevivir. Alcanzó a dar varios pasos antes de desplomarse frente a la calle 25 con carrera 7
¿Lo mató por envidia? Así empezó el odio de Luis Carlos contra Neyder
En el marco de la audiencia concentrada, la Fiscalía Cuarta Seccional de la Unidad de Vida de Bucaramanga indicó que este delito habría sido motivado por ‘celos’ o envidia. Según el estudio, Luis Carlos Jaimes Fula desarrolló un sentimiento de ira cuando a Neyder, quien ya ha fallecido, le otorgaron el oficio de atención a vehículos.
“Luis Carlos sintió envidia cuando a Neyder, un chico de 24 años, se le ofreció la oportunidad de cuidar los vehículos, la misma labor que él ejercía anteriormente. Estos celos surgieron debido a que él había sido despedido de su trabajo por el robo de las autopartes de los automóviles. “Ese conflicto lo habría impulsado a perpetrar el homicidio”, señaló el fiscal, fundamentándose en la declaración del padre de la víctima.
El CTI de la Fiscalía logró obtener los videos de las grabaciones de seguridad del sector y en ese lugar corroboraron que Luis Carlos era el acusado de este homicidio que perturbó los primeros días del año en Bucaramanga.
En la actualidad, este individuo de 29 años está recluido mientras sigue el juicio por el delito de homicidio agravado.
