Written by 9:47 am NACIONAL

Desplazados por la guerra: la esperanza en Cúcuta ante la tragedia del despojo

Esta ola de violencia también ha impactado a los animales.

“Me vine con lo que llevaba puesto, subimos a un camión con algunos parientes y llegamos aquí, no conocemos nada ni a nadie, pero queremos estar vivos”, expresó, con voz torcida y mirada desorientada, un anciano, víctima del conflicto bélico en el Catatumbo, que ayer arribó a Cúcuta en busca de resguardo.
Desde el corregimiento Filo El Gringo del municipio de El Tarra, este individuo se vio obligado a abandonar lo que había edificado durante muchos años y desconociendo si podrá volver, ya que la alerta de los grupos armados ha sido evidente: si se retiran, sus viviendas podrían ya tener nuevos propietarios.

“Nos informaron que podíamos partir, pero que si volvíamos y ya habían ocupado la casa, no podríamos reclamar nada y duele, pero pensamos con los hijos que lo material puede recuperarse, pero la vida no”, añadió.Y al igual que él, ayer, cientos de individuos de varios municipios del Catatumbo continuaban arribando a la capital de Norteamérica, escapando de la ola de violencia que se desató el pasado jueves entre el ELN.

Una circunstancia que forzó a las autoridades nacionales, departamentales y municipales a poner en marcha todas sus rutas de atención, detallando que, a partir del sábado, la Alcaldía de Cúcuta se puso en marcha y habilitó el Palacio y el Teatro Municipal, junto con el parque Santander, para acoger a los desplazados, consiguiendo asistir a 2.790 personas únicamente durante ese día.

Una labor coordinada con la Personería, la Defensoría del Pueblo, la Procuraduría, el Consejo Noruego para Refugiados, la Cruz Roja, la Defensa Civil, entre otras entidades, permitió que la administración municipal habilitara hospedajes temporales para las familias, proporcionándoles kits de noche y de higiene, mientras que a otros individuos que optaron por hospedarse en hogares de familiares se les proporcionó colchonetas.

Además, el domingo pasado, la Alcaldía de Cúcuta habilitó el Estadio General Santander para seguir acogiendo a los desplazados, realizar el censo anticipado, recoger sus declaraciones y otorgarles todas las ayudas y donaciones que han estado llegando.

“Aquí estamos repartiendo a los individuos en función de sus municipios, veredas, corregimientos, entre ellos mismos se conocen y saben quiénes pertenecen a la región. Por ello, seleccionamos el estadio, ya que es un lugar abierto y cuenta con más espacios para su atención”, declaró Jorge Acevedo, alcalde de Cúcuta.

Además, el mandatario informó que se adecuó este lugar para que todas las instituciones puedan ofrecer sus servicios de forma más extensa, especialmente en lo que respecta a la salud y la nutrición.

Asistencias y medidas departamentales

También se ha presentado por parte de la Gobernación de Norte de Santander una serie de acciones temporales en áreas de educación, salud y distribución de ayudas humanitarias, con el objetivo de afrontar la emergencia provocada por las disputas entre el ELN y las FARC, que hoy han terminado cuatro días.

Durante la mañana de ayer, diez camiones cargados con alimentos, colchonetas, agua potable, equipos médicos y otros recursos vitales, partieron de la ciudad de Cúcuta hacia Tibú y Ocaña.

En horas de la tarde, el Gobierno nacional desplegó un avión que transportaba varias toneladas de alimentos para ellos.

Además, en el ámbito de la salud, mediante el Instituto Departamental de Salud (IDS) se estableció la alerta naranja para priorizar el cuidado de heridos y desplazados. Se están coordinando acciones en terreno con los alcaldes de la región para asegurar una atención médica apropiada.

En lo que respecta a la educación, es importante tener en cuenta que, pese a que las clases comienzan hoy en los colegios públicos de Norte de Santander, en toda la región del Catatumbo se han suspendido las actividades académicas, con la esperanza de que los niños y jóvenes puedan regresar a las aulas el 27 de enero.

La Gobernación comunicó que se están otorgando refugios temporales en infraestructuras como el Colegio La Esperanza en Tibú y el Coliseo Argelino Durán Quintero en Ocaña. Además, indicó que, en colaboración con entidades como Pies Descalzos, se está trabajando en la adaptación de espacios extra y en la atención a más familias desplazadas.

Visited 9.921 times, 1 visit(s) today
Cerca de