En el municipio de Argelia, Cauca, varios uniformados del Ejército y la Policía Nacional fueron secuestrados por la comunidad la noche del 10 de noviembre.
La situación comenzó cuando un vehículo ignoró un puesto de control de la Policía, provocando un tiroteo en el que murió un ocupante del automotor, presuntamente miembro de las disidencias de las Farc, estructura Carlos Patiño, bajo el mando de Iván Mordisco. Sin embargo, la comunidad sostiene que la víctima no pertenecía a ningún grupo armado.
Tras el incidente, la comunidad rodeó y retuvo a los uniformados, mientras denuncian abusos por parte de la fuerza pública en la región.
La situación de tensión fue registrada en videos difundidos en redes sociales, en los que los habitantes locales exigen a los uniformados que se quiten sus gorros y muestren sus rostros. Según algunos informes, la comunidad estaría siendo influenciada por disidencias armadas para ejercer presión sobre las autoridades.
Las autoridades han iniciado diálogos en un esfuerzo por resolver la situación y evitar un escalamiento del conflicto, que continúa bajo el monitoreo de organismos de seguridad y derechos humanos en la zona.